La Telón veneciano es sumamente elegante y su levantamiento constituye, en sí mismo, un espectáculo que anticipa lo que su apertura anuncia.
Se hace con la fruncido vertical.
La mecánica de la Telón veneciano es idéntica a la de la Telón austríaco y a la Telón romano.
Los tres telones son totalmente diferentes en cuanto a confección y estética, pero los tres se abren verticalmente, recogiendo la tela de abajo hacia arriba a través de un sistema de cables y anillas de guía cosidas en el lado posterior.
La compactación permite la apertura vertical incluso en escenarios de altura extremadamente baja y donde no hay espacio lateral.
El Telón veneciano también se puede abrir sin compactación, es decir, levantando el telón en su conjunto con el sistema de Apertura en guillotina. En ese caso se convierte en un simple Telón en guillotina con fruncido vertical.
El fruncido vertical permite que la Telón veneciano se abra también con el borde inferior perfilado, característica que comparte con la Telón austríaco.