El Telón romano está hecho con confección lisa y de una sola hoja que se abre verticalmente, recogiendo el tejido de abajo hacia arriba por medio de un sistema de cables y anillos de guía cosidos en su lado posterior.
Por lo tanto, su mecánica es la misma que se utiliza para la Apertura veneciana y la Apertura austríaca, cuyas cortinas, sin embargo, son totalmente diferentes en cuanto a confección y estética.
Sobrio pero elegante, no se encuentra a menudo como una cortina principal, aunque es frecuente usarlo para pantallas de tul o tela durante espectáculos de todo tipo, ya que permite efectivamente y de forma barata la apertura vertical en situaciones en las que una altura del escenario insuficiente no permite el uso de la Apertura en guillotina.
La confección lisa no deja que el Telón romano se abra con el borde inferior perfilado.